Hoy solo quiero escribirle a tu boca, decirle que me gusta la forma en que se tuerce cuando no quiere nada, que me gusta la forma en que se estira cuando está enojada y me gusta la forma en que bordea tus dientes cuando sonríes, la amo cuando se mueve para cantar y la amo mucho más cuando me besa, amo la forma en que me besa. Hoy solo quiero escribirle a la boca ya que es una de mis partes preferidas de tu cuerpo, porque cuando me besa, me saca de la realidad, porque cuando se posa en mi piel, y bordea mi cuerpo estremece mi alma, me encanta los sonidos que ella hace; uno de mis juegos favoritos es dibujarla con mi lengua, mis dientes a veces la quieren arrancar, para guardarla en mi billetera y sacarla en los momentos tristes, para que bese mis ojos y los limpie de lagrimas, de humo, de tinta, y en las noches ponerla al lado de mi almohada, para que al despertar sea lo primero que vea, lo primero que bese, tu boca, la boca que me vuelve loca, envido el humo que se mete dentro de ella, juega con tu lengua y luego sale bailando, burlándose de mí, porque ha estado dentro de tu boca.
Quisiera adueñarme de ella, para que sus besos sean exclusivos de mi boca, de mi piel, de mis pestañas, de mis dientes, de mi lengua, de mi ser; para que nuca le pronuncie palabras de amor a otras almas perdidas, para que me cante al oído antes de dormirme y así mismo se meta a caminar en mis sueños; necesito a tu boca como el mar a la sal, como los peces al agua, como el rio a sus piedras, quiero apropiarme de cada gesto que haces con ella, de esos simpáticos pucheros, y de cada sonido.
Tu boca la beso, la guardo, la muerdo, la dibujo, la sueño, me adueño, me la como, tu boca que sabe a rock and roll, a coca cola y a cigarrillo mentolado.
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