Liberemos el tiempo

Rompamos todos los relojes para liberar el tiempo, para que no sea medido, para que no sea ni lento ni rápido, para que no se nos pase; liberémonos nosotros para no cumplir horarios, para vivir sin afán, para contemplar el cielo, el viento, el pasto, la gente, para jugar con las sombras y escuchar el viento; dejemos el tiempo quieto para que en verdad se inmortalicen los momentos, para que los acontecimientos sean más profundos, los besos más prolongados, el amor más duradero, que no nos pasen los minutos, los días ni los años, que la felicidad sea eterna, para que las canciones sean más largas y lo que nos gusta nunca tenga fecha de vencimiento, para que no cumplamos años ni nos envejezcamos, dejemos el tiempo libre para que vaya y venga cuando quiera, para que nos paralice las sonrisas y la alegría sea perdurable, démosle tiempo al tiempo para que salga a jugar, a pasear, a danzar; podremos revivir los recuerdos, podremos viajar en el tiempo, caminar más despacio, mirar por un rato mas, respirar más lento, susurrar más seguido, saborear con más gusto y dejar que la tranquilidad y la plenitud se pose en nuestros pechos para siempre.